La curiosidad, aunque tenga su encanto,
acaba casi siempre en grandes llantos.
Ejemplos de esto pueden verse a diario.
Y es que, aunque le disguste al bello sexo,
no brinda sino un goce muy modesto,
que se escurre al momento de las manos
y siempre resulta demasiado caro.
Barba Azul. Charles Perrault - Graciela Montes
... es un primer boceto ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario